Legisladores en Irlanda del Norte presentaron un proyecto de ley que busca prohibir los abortos en casos de discapacidades no fatales.
Paul Givan, miembro del Partido Unionista Democrático (DUP) en la Asamblea Legislativa de Irlanda del Norte, propuso el lunes 15 de febrero el proyecto “Severe Fetal Impairment Abortion (Amendment) Bill”, que eliminaría el “acceso a abortos en casos de deterioro fetal grave” como exige el Gobierno del Reino Unido.
Actualmente, la ley de Irlanda del Norte permite abortos voluntarios hasta las 12 semanas de embarazo. Los abortos de hasta 24 semanas son legales cuando se determina que la salud física o mental de la madre está en riesgo. Los abortos hasta el momento del nacimiento son legales en casos de alteración fetal grave (discapacidad no fatal) o anomalías fetales incompatibles con la vida.
Según el estatuto actual, un feto que haya sido diagnosticado con una afección como el síndrome de Down o el paladar hendido puede ser abortado más allá del límite legal de 24 semanas.
El proyecto de ley de Givan aún permitiría abortos tardíos en casos de anomalías fetales incompatibles con la vida. La propuesta cuenta con el apoyo del grupo de derechos de personas con discapacidad Don’t Screen Us Out.
“La ley actual les dice a las personas con discapacidades que valen menos que otras personas, que su contribución es menos valiosa, sus vidas menos importantes, menos plenas”, dijo Givan en un comunicado.
“La idea de que el síndrome de Down es un problema enorme que debería abordarse mediante el aborto es escalofriante. No es necesario mirar muy lejos para ver la vida plena que llevan las personas con discapacidades; enriquecen nuestras comunidades y familias”, continuó.
Hablando al programa Good Morning Ulster de la BBC, Givan dijo que su proyecto de ley es “una oportunidad para que las personas se unan y luchen contra una ley discriminatoria y perjudicial”, refiriéndose a la ley de aborto existente.
Agregó que leyes como la Ley de Discapacidad de 1995 han proporcionado “apoyo” a las “personas con discapacidad”, un apoyo que debería extenderse a los no nacidos.
“Creo que aquellos derechos, y estos, son derechos humanos que deben conferirse a las personas antes de que nazcan y de eso se tratará esta campaña”, dijo.
El aborto se legalizó en Irlanda del Norte en abril de 2020, después de que el Parlamento británico impusiera cambios a las leyes de aborto y matrimonio de la región. La legislatura local descentralizada no pudo bloquear los cambios.
Antes del 31 de marzo, el aborto estaba legalmente permitido en Irlanda del Norte solo si la vida de la madre estaba en riesgo o si existía riesgo de daños graves a largo plazo o permanentes a su salud mental o física. La región no había sido ncluida en la Ley de Aborto del Reino Unido de 1967, que legalizó el aborto.